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Hoy quería comentar, aunque no se trate de un producto meramente tecnológico, pero sí que me ha parecido interesante y puedo contar desde mi propia experiencia utilizándolo: se trata de Housers, un portal que te permite invertir desde 100 euros en inmuebles que, debido a las oportunidades del mercado, en una especie de outlet inmobiliario, se pueden conseguir con hasta un 40% de descuento sobre el original.
Lo bueno de Housers es que este tipo de operaciones estaba destinado siempre para los peces gordos con mucha pasta (dinero llama a dinero, ya se sabe), que aprovechaban estas oportunidades que al resto de los mortales, los pequeños ahorradores no se nos ponían a nuestro alcance.
Cómo funciona Housers
El primer paso para poder ver todas las herramientas de Housers es apuntarte, de forma gratuita, sin compromiso ni datos bancarios, ya que te permite acceder a los dossieres específicos de cada proyecto que te va a permitir estudiarlos y elegir el que más te convenza.
Antes de nada, decir que aquí nuestra finalidad no es adquirir inmuebles, sino una rentabilidad puramente financiera, de forma que simplemente, como un inversor más, queremos una rentabilidad financiera al final de la vida de la inversión.
Lo bueno para rentabilizar nuestras inversiones es que este tipo de inmuebles se suelen comprar por un valor bastante más bajo de lo que tiene el mercado, consistiendo en una pequeña reforma, alquiler para rentabilizarlo hasta que se produzca la progresiva subida de precio y en un periodo de 3 a 4 años deshacerte de la inversión con rentabilidades que van desde un 30 a un 80%, algo que de media supone entre un 7,5%-20% anual, lo que supone rentabilidades que ni en renta variable, ni muchos menos en depósitos bancarios podríamos obtener.
Housers es fiable y seguro?
La primera idea que nos viene a la cabeza es que el tema de Housers sea un chiringuito financiero, de esos que desaparecen y todos los datos estén sobre papel con problemas si algún día cierra.
En este caso, al invertir en un inmueble, no es de forma ficticia, sino totalmente real, escriturando ante un notario de una sociedad inmobiliaria que se inscriba para la compra y gestión del inmueble, por lo que todo es de carne y hueso, real e independiente de cómo le vaya a Housers en el futuro.
Si en el futuro decides que quieres desinvertir, puedes ofrecer la parte de inversión a otros socios de tu inmueble, o bien poder publicarlo en un tablón en el que te permite que otros inversores te recompren tu parte y continúen invirtiendo en inmuebles.
Comentar que todos los proyectos elegidos tienen rentabilidades lo suficientemente atractivas, pero se encuentran en un escenario de simulación real de la marcha del mercado (sin cuentos de la lechera), por lo que incluso se pueden obtener rentabilidades superiores, pero de forma conservadora se indican las rentabilidades que, en el caso de que el mercado continúe la tendencia existente, podríamos tener el futuro.
En resumen, Housers me parece una buena opción para que los pequeños ahorradores nos metamos en unas inversiones muy atractivas que sólo estaban destinadas para la gente con dinero que pega pelotazos, y que, sin ser pelotazos, desde luego se pueden encontrar remuneraciones mucho más atractivas de las que ofrece el mercado de dinero en la actualidad. Aparte de esto, me parece importante constatar en la seguridad jurídica de la inversión, que es independiente de si Housers se va a pique o no, con constitución de escritura mancomunada bajo notario, exactamente igual que en la compra de una vivienda habitual.
Si quieres conocer un poco más cómo funciona Housers, te remito a un artículo más específico sobre este portal que está teniendo una muy buena aceptación entre los inversores.
